Antes de poder dormir, necesitamos tranquilizar nuestra mente y apagar las luces del apartamento de los pensamientos. Así, la mente, que ha estado a tope durante el día, descansará. El rooibos dulce y la camomila te envuelven cariñosamente en sus brazos y te dejan listo para dormir. La dulce cáscara de cacao y la vainilla te cantan una nana mientras que reconfortantes especias como el clavo, el jengibre y la pimienta negra te arropan.
Ingredientes: rooibos*, flores de manzanilla*, cáscara de cacao*, regaliz*, extracto de vainilla*, canela*, cardamomo*, extracto de melisa*, nuez moscada*, jengibre*, clavo*, pimienta negra*
(* agricultura biólogica)